American Horror Story, Temporada 7, Capítulo 9: Beberse el Kool-Aid

Después de una rápida conversación, Ally le deja en claro a Ivy que le es imposible perdonarla, pero que al menos deben unirse para salvar a su hijo de la secta, así que alistan sus cosas y se preparan para fugar. Es entonces que son detenidas por el ejercito de Kai y llevadas ante él para probar su lealtad bebiendo un refresco envenenado. Y lo hacen, pues la otra alternativa es morir por un disparo.

Pero todo resulta ser una broma de Kai y ambas salen de ahí con más ganas de darse a la fuga. Vuelven a preparar sus cosas, van por Oz a la escuela y les dicen que su niñera ya se lo ha llevado. Obviamente saben que se trata de Winter y van a buscarla. Al llegar otra vez a la base de la secta, descubren que Kai le ha lavado el cerebro a Oz para hacerle creer que él es su padre biológico. Sin saber qué hacer, las dos madres dejan a su hijo con el culto y se retiran. Llega la noche, Ally le prepara una cena especial a Ivy y le cuenta cómo pudo sobrevivir al encierro en el manicomio: con un gran deseo de venganza. Ivy cae al suelo escupiendo sangre y muere.

Como segunda parte de su plan, Ally va a la clínica donde le hicieron la inseminación artificial y soborna a una enfermera para que modifique unos papeles y hacerle creer a Kai que en serio es el padre de Oz. Kai cae en la trampa y abraza a Ally creyendo que juntos le han dado luz al nuevo mesías.