Inicia la feria del condado y Anne está decidida a ganar el concurso de pasteles utilizando la receta que le heredó Mary, el problema es que por andar distraída deja caer el frasco de vainilla y tiene que ir a la despensa por otro. Toma el primer frasco con la etiqueta "Vainilla" que encuentra y como está un poco resfriada no se da cuenta de que su contenido es en realidad otra cosa.
El pastel queda bastante bien, al menos el apariencia, y Anne comienza a llorar de felicidad recordando a Mary y deseando que ella pudiera estar ahí para ver su éxito. Pero quien si está ahí para verla es Gilbert, que llega para pedirle un favor a Matthew y se encuentra a Anne llorando y con mocos en la cara. Ella obviamente se siente muy avergonzada por eso y más tarde va a visitar a Diana. quien la ve así toda preocupada por como la vio Gilbert y le hace la pregunta definitiva: "¿Estás enamorada de él?".
Y Anne entra en una crisis existencia al no saber si de verdad está enamorada o si debería estarlo o si hay alguna remota posibilidad de que Gilbert pudiera sentir algo por ella. Va a la feria y se encuentra con una adivina a quien le pregunta si en su bola mágica puede ver a su verdadero amor. La adivina dice que sí y por diez centavos pasa a describir a su futuro novio como "Alto, apuesto y buen bailarín", una descripción de lo más random y que podría haber encajado con cualquiera, pero Anne lo toma como la confirmación de que Gilbert es el indicado para ella.
Sin embargo, la felicidad y la esperanza no le duran mucho tiempo a Anne, pues en la misma feria se encuentra con Gilbert dando un paseo Winifred. Y para empeorar su suerte, el jurado del concurso prueba su pastel y les parece horrible, porque en el frasco de vainilla en verdad había linimento.
Anne sale corriendo en busca de un lugar para esconderse de la vergüenza. Gilbert la alcanza y le dice "A Mary le hubiera parecido muy gracioso". Ella solo atina a darle las gracias y sigue corriendo. Se oculta un rato detrás de unos juegos, pero luego vuelve a salir y para animarla un poco, Marilla decide hacer algo muy arriesgado que normalmente no haría nunca: volar en globo. Suben a lo alto y ven toda la costa de la Isla del Príncipe Eduardo.
Llega la noche y se da el gran baile. Todos se reúnen para festejar. Josie sale un rato para hablar con Billy a solas pero él quiere algo más, comienza a besarla y a tocarla sin su consentimiento y ella lo aparta de un empujo, visiblemente contrariada. Billy regresa a la fiesta y comienza a esparcir rumores de que tuvo algo con Josie en lo oscurito. Anne lo confronta por andar diciendo esas cosas, pero el chico ni pestañea y continúa mintiendo.
A la mañana siguiente, todas las chicas de la escuela comienzan a hablar de que la reputación de Josie ha quedado manchada y ya nadie querrá casarse con ella. Anne protesta y trata de convencer a sus compañeros de que escriban algo sobre el ataque a Josie en el periódico escolar, pero ellos la ignoran olímpicamente y escriben sobre las verduras en la feria. Anne, por supuesto, no está dispuesta a dejarse silenciar tan fácilmente y por la noche usa la imprenta a escondidas para hacer su propia edición del periódico escolar.
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