Ok, esta historia toma lugar durante las vacaciones cuando Margot, una joven universitaria que todavía sufre por la repentina muerte de su padre, decide acompañar a su amiga Jules a una fiesta para relajarse un rato, ahí se encuentran con dos chicos, Seth y J.D., este último es quien les cuenta a todos de la "No-End House" una supuesta "casa del terror" que aparece y desaparece sin dejar rastro y que se promociona con extraños videos que llegan de forma anónima. Esa noche, al volver a casa, Margot se encuentra con uno de esos videos en su televisión y entre las incomprensibles imágenes que ve logra distinguir una dirección.
Al llegar a la casa los cuatro amigos se dan cuenta de que no están solos, hay una gran cantidad de jóvenes que también acudieron a lugar por pura curiosidad y que salen de ahí visiblemente afectados. Sin dejarse impresionar, creyendo que solo se trata de un juego muy bien elaborado, ingresan a la primera habitación y se encuentran unas esculturas de ellos mismos. La luz se apaga y al volverse a encender, las esculturas están partidas a la mitad por unas manos oscuras, todas excepto la de J.D.
En la segunda habitación se encuentran con un individuo enmascarado que se acerca a Margot para decirle algo al oído. Las luces se apagan y al encenderse él ya se ha ido dejando un rastro de sangre tras de sí. Jules se acerca a su amiga para preguntarle qué le dijo y esta responde "Bienvenida otra vez, marciana" una frase con la que su padre solía saludarla.
A la tercera habitación solo se puede ingresar de uno en uno. Margot se adelanta y se encuentra en un pasillo en medio del cual hay un loco escondiéndose detrás de un espejo. Margot lo pasa por un costado e ingresa a la cuarta habitación, donde puede ver una proyección de su amiga buscándola y a su padre con el rostro convertido en esqueleto.
En la quinta habitación se encuentra con una réplica exacta de la sala de su casa y un individuo extraño sentado en la misma posición en la que ella encontró a su padre muerto. El tipo se pone en pie de manera imprevista y abraza a Margot, ella ruega que la deje ir y él la suelta pero antes de verla partir le advierte "Tendrás que atravesarla toda para llegar a casa". Para su sorpresa, al otro lado de la siguiente puerta solo se encuentra la fría y oscura calle. Espera junto a Jules a que los dos chicos salgan también pero nunca llegan y deciden volver a casa. Ya es de día, Margot ingresa a su hogar, se dispone a irse a dormir a su cuarto, cuando en la cocina se encuentra a su padre preparando el desayuno.
Al llegar a la casa los cuatro amigos se dan cuenta de que no están solos, hay una gran cantidad de jóvenes que también acudieron a lugar por pura curiosidad y que salen de ahí visiblemente afectados. Sin dejarse impresionar, creyendo que solo se trata de un juego muy bien elaborado, ingresan a la primera habitación y se encuentran unas esculturas de ellos mismos. La luz se apaga y al volverse a encender, las esculturas están partidas a la mitad por unas manos oscuras, todas excepto la de J.D.
En la segunda habitación se encuentran con un individuo enmascarado que se acerca a Margot para decirle algo al oído. Las luces se apagan y al encenderse él ya se ha ido dejando un rastro de sangre tras de sí. Jules se acerca a su amiga para preguntarle qué le dijo y esta responde "Bienvenida otra vez, marciana" una frase con la que su padre solía saludarla.
A la tercera habitación solo se puede ingresar de uno en uno. Margot se adelanta y se encuentra en un pasillo en medio del cual hay un loco escondiéndose detrás de un espejo. Margot lo pasa por un costado e ingresa a la cuarta habitación, donde puede ver una proyección de su amiga buscándola y a su padre con el rostro convertido en esqueleto.
En la quinta habitación se encuentra con una réplica exacta de la sala de su casa y un individuo extraño sentado en la misma posición en la que ella encontró a su padre muerto. El tipo se pone en pie de manera imprevista y abraza a Margot, ella ruega que la deje ir y él la suelta pero antes de verla partir le advierte "Tendrás que atravesarla toda para llegar a casa". Para su sorpresa, al otro lado de la siguiente puerta solo se encuentra la fría y oscura calle. Espera junto a Jules a que los dos chicos salgan también pero nunca llegan y deciden volver a casa. Ya es de día, Margot ingresa a su hogar, se dispone a irse a dormir a su cuarto, cuando en la cocina se encuentra a su padre preparando el desayuno.
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