EDHA, Capítulo 1: La marca de la venganza



Ok, estamos en medio de un desfile de modas y la diseñadora argentina Edha no la está pasando nada bien. Primero, su empresa está en quiebra y su padre la presiona para que acepte socios que no quiere, luego el vestido con el que su hija iba a debutar como modelo se mancha con vino y tiene que arrancarle algunas partes para salvar la situación, más tarde se encuentra con Jauregui, su ex marido, quien quiere recuperar su relación con la hija que abandonó, y por último, se cumplen veinte años del suicidio de su madre, así que no, no la está pasando nada bien.

A la mañana siguiente, para tratar de cubrir en algo las deudas, Edha acude a ver a Odette, una artista con quien su madre colaboró tiempo atrás, por lo que parte de sus obras le pertenecen por herencia. Odette acepta vender dicha parte y darle el dinero, poniéndole como única condición que asista junto a su padre a su última exposición artística. Tal como lo acordaron, Edha y su padre van a la exposición y en la última sala se encuentran a Odette colgando del techo. Su gran obra maestra.


Paralelamente conocemos a Manuel, el capataz de un taller clandestino, quien trata de ayudar a su hermano Teo dándole ropa gratis para que pague una deuda que tiene con un mafioso local. Pero el malagradecido de Teo le termina confensado que no solo se llevó la ropa, sino también a su novia, Celia, con quien tiene una relación a escondidas desde hace tiempo. Manuel cae en depresión y comienza a beber y beber, hasta que un problema eléctrico incendia el edificio y él queda atrapado por tratar de salvar el taller. Teo ve los restos de su hermano y les promete a los trabajadores sobrevivientes que hablará con la empresa que los explotaba: EDHA.

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