Élite, Temporada 4, Capítulo 1: El Nuevo Orden [Resumen]

Ok, inicia un nuevo año en Las Encinas con una gran sorpresa: Azucena, la mamá de Ander, ha sido despedida como directora (la verdad, ya se estaban tardando, con todas las locuras que pasaron bajo su dirección...) y su lugar ahora lo ocupa un CEO, un hombre de negocios, mezcla de Mark Zuckerberg con Steve Jobs, llamado Benjamín... Bejamín... No sé, nadie menciona su apellido en todo el capítulo. Y bueno, resulta que a esta persona no le interesa en absoluto el tema educativo, lo que él busca es que su institución sea económicamente rentable, por lo que se dispone a dejar en la calle a todos los estudiantes becados que, a su parecer, no merecen estudiar ahí, comenzando con Omar y Samuel, quienes... Pues no, no deberían estar ahí.

Digo, a Samu lo echaron por ponerse violento y a Omar la ex directora le regaló una beca básicamente por ser el novio de su hijo. Pero bueno... La cuestión es que ahora ambos deben rendir un examen para seguir en Las Encinas Y ESE es el inicio de los problemas que terminarán involucrando a todos los personajes de la serie, incluyendo al mismo director y a su familia.

Porque verás... El tal Benjamín ese no llegó solo, sino que también se trajo consigo a sus tres hijos: Ari (un clon de Nadia, hecha para tentar a Guzmán), Patrick (un clon creado con los genes de Valerio y Polo, hecho para hacer tambalear la relación de Omar y Ander) y Mencía (que es básicamente un clon de Rebeka, pero con mejor gusto para vestir, y es el único personaje nuevo que no está aquí para destruir relaciones). Y TODOS ELLOS SE INVOLUCRAN EN EL TEMA DEL BENDITO EXAMEN.

Para empezar, Mencía se enamora de Rebeka a primera vista y quiere caerle bien a sus amigos, así que les da un consejo para librarse de la prueba: Si quieren manipular a su padre, primero tienen que manipular a su hija favorita, Ari. Y como Guzmán le prometió a Nadia que cuidaría de Omar, pues dice "Ok, déjenmelo a mí, que ya tengo experiencia en esto" y se lleva a Ari a tomarse un milkshake frente al lago. Ambos conversan de la vida, de las pérdidas que sufrieron siendo muy jóvenes (él perdió a su hermana y a su mejor amigo, ella a su mamá y tres hámsteres), y en medio de eso, muy sutilmente, Guzmán le suelta la idea de que esos exámenes para los becados son un tanto injustos. Ella promete hablar con su padre al respecto y él le agradece con un abrazo.

MIENTRAS TANTO, a Mencía se le cumple el sueño y tiene una cita con Rebeka en un edificio con piso de cristal, donde después de unas copas y mucho baile al fin se anima a besarla. Sin embargo, Rebe reacciona algo confundida ante este acercamiento y decide irse ahí mismo. No molesta, ojo, simplemente confundida. Y Mencía, pues solo la ve partir y se queda toda la noche en la calle ahogando sus penas. Llega a su casa borracha, somnolienta y decide echarse a dormir en vez de ir a clase, algo que no le hace ninguna gracia a su padre ni a su hermana Ari.

Ya por la noche, el director intenta por última vez llevarse bien con su hija rebelde y la invita a cenar en familia, pero ella se niega rotundamente, dando inicio así a una nueva pelea que termina con su padre cortándole el acceso a su cuenta bancaria. Ari trata de razonar con su hermana, pero esta le cuenta la verdad, que Guzmán solo la invitó a salir para anular el examen de los becados, que fue ella quien le dio esa idea. Y no hacía falta ensañarse con la pobre Ari, pero Mencía sigue y sigue diciéndole que Guzmán jamás se fijaría en ella, que si no se ha visto en un espejo, que es una idiota, etc. Muy feo todo.

Y una vez que se cansa de humillar a su hermana, Mencía toma sus cosas y se va a un bar a tomar mientras espera a que Rebeka llegue a pagarle el trago, porque ella no tiene ni donde caerse muerta. Pasan las horas. La Rebe sigue dejando en visto sus mensajes. Se le acerca un viejo a pagarle la bebida, y ya sea porque se siente sola, porque está medio borracha o porque ya pues qué, Mencía se acuesta con él. Y la mañana siguiente despierta sola, con un buen puñado de billetes al lado.

Y sí, algo me dice que este es el inicio de un negocio muy peligroso.

Por su lado, Patrick está empeñado en quedarse con Ander y le propone una cosa: si van a bailar, le entrega las respuestas para el examen de Omar. Así pues, el muchacho reúne todas su fuerzas para no caer en tentación y acude a una de esas discos donde parece que no tienen aire acondicionado, porque todo el mundo anda medio desnudo. Patrick se le restriega por todo el cuerpo como serpiente, pero Ander se mantiene firme. "Yo haría lo que fuera por Omar, menos traicionarle" le dice y se va dejando a Patrick con las ganas.

MIENTRAS TANTO en un club frente a un lago, Samuel, quien trabaja ahí atendiendo la barra, ve al director cenando con su hija (en esa cena a la que Mencía se negó a ir) y comienza a hablarle sobre Omar y lo mucho que merece estar en Las Encinas, aunque su jefe no tarda en aparecer y echarlo por andar molestando a la clientela. Sin embargo, algunas de sus palabras sí que logran adentrarse en la mente del director y lo hacen reflexionar sobre sus acciones. Le pregunta a la pobre Ari si debe reconsiderar lo de los exámenes... Ella responde que no.

Ese día algo cambió dentro de Ari, algo se quebró...

Así pues, a pesar de todos los intentos, el día del examen llega y Omar siente que tiene la soga atada al cuello. Patrick cumple su promesa, le entrega un papelito con todas las respuestas, pero Omar no puede estar seguro de que sean las correctas, así que entra a dar la prueba con los nervios de punta.

Pero bueno, al final, al director se le ablanda el corazón y aunque sabe que Omar copió, por su nota casi perfecta, lo deja pasar como si nada. Mientras que a Samuel lo felicita por su buen uso de la palabra a la hora de defender a su compañero. Pero eso sí, le recomienda que empiece a pensar más en sí mismo y deje de librar las batallas de otros.

Y ya por último, Ari se cobra su venganza diciéndole a Guzmán que habló con Nadia sobre su cita, algo que deja perplejo al muchacho y lo hace perder la concentración en la piscina, algo que ella aprovecha para ganarle nadando. "Tú has usado la mentira conmigo, yo la he usado contigo" le dice.

Es entonces cuando damos un salto al futuro y nos encontramos nuevamente en el club frente al lado, donde una fiesta ha vuelto a terminar en muerte. Ari se ha ahogado, la policía está interrogando a los asistentes, los rescatistas hacen lo posible para salvar a la joven y... Contra todo pronóstico, lo consiguen. Ari está viva. ¿Qué podrá decir sobre este incidente? Lo veremos en el siguiente capítulo.