Lo Free contra lo Freek: Y el ganador es...

En realidad no tengo idea de quien habrá ganado más ese día. Pero sí sé quien perdió: NOSOTROS.

A ver... imagina que vas por ahí diciendo que abrirás un restaurante y que darás comida gratis a los que vayan a la inauguración. Llega el día, el lugar está repleto de gente que espera a que cumplas tu promesa, pero tú sólo alimentas a cuatro gatos y al resto les dices que la promoción ya se acabó y que si quieren pueden observar la carta ¿No sería eso algo increíblemente hijodeput@? Bueno, eso fue el Free Comic Book Day organizado por Kingdom Comics.

Cinco mil comics, eso es lo que habían mandado a imprimir, y sólo iban a regalar dos mil quinientos por día. Y aun así, promocionaron el evento por aire, mar y tierra, esperando una concurrencia masiva ¿El resultado? Sólo los frikis que se amanecieron junto a la puerta se llevaron su historieta; al ciudadano común, al que recién se enteraba de la existencia de este evento, no se le regaló ni el saludo.

¿Es que sólo querían llenar el local sin importar la satisfacción del público? ¿O su seguridad?

¿A quién demonios se le ocurre hacer una pasarela cosplay en la vía de acceso para discapacitados? ¿No saben acaso que las escaleras y pasillos SIEMPRE deben estar libres? Ocurría un temblor o un incendio y nos moríamos todos aplastados. Donde sea que se detuviera un cosplayer, ahí se armaba un tumulto que impedía el paso. Algunas zonas estaban tan llenas de gente que aun con aire acondicionado era inevitable sentir un insoportable calor y olor sobaco.

Wilson es como mi segundo hogar, y me encantó la idea de que se hicieran eventos de temática friki en un lugar tan céntrico, pero el tercer piso del Cyber Plaza no sirve para eso.

Por lo demás, fue una aburrida feria de historietas sin otras actividades aparte de la ya mencionada pasarela y un tour de The Walking Dead (con costo, por supuesto).

Mientras tanto, a muchas cuadras ahí...

Llegamos al Freek Comic Book Day y había un tipo inmenso sentado junto a la puerta comiendo su pollo a la braza y cobrando una "colaboración" no voluntaria de tres lucas. Eso es lo que admiro de La Diaria de Daria: si te quieren meter rata, te la meten de frente, sin asco.

Ellos no estaban arriesgando nada con ese evento. Lo que sea que organicen siempre tiene un público asegurado, gracias a su equipo de cosplayers DASH Cosplay, y es un público que maneja su billete, que tiene hasta para comprar peluches usados a doscientos soles y luego devolvérselos a sus dueñas para hacerse los caballeros, y esa entrada la iban a pagar con los ojos cerrados.

El problema era para los que vendían dentro, porque había que ser un verdadero fan para comprar merchandising original o comics de colección, pero la mayoría de la gente que había acudido a ese lugar sólo era fan de... Dash. Se la pasaban rodeándolas como si fueran sus guardaespaldas, haciendo colas interminables para tomarse fotos con ellas, ni siquiera sabían qué cosplay estaban usando (Rouse Shinigami tuvo que repetir hasta el cansancio que era "Obi Wan en versión vestido" porque nadie lo manyaba, ni yo, todas estaban adaptando personajes de Star Wars de una manera muy... imaginativa) pero igual querían foto, y a los stands ni los miraban. 

Luego hubo un concurso de trivias de Star Wars y no acertaban ni una. Mizao Asura (en un delirante cosplay de Ewok) dijo "La siguiente pregunta va sólo para mujeres" y resulta que no había mujeres entre el público, tuvieron que llamar a una de las chicas que atendía en los stands. Se fueron las Dash y se fue la gente.

La verdad, el panorama era bastante triste, y sólo eran las cinco y media. De pura pena le compré un comic a unos chicos que habían venido desde Huachipa especialmente para vender sus obras originales en ese evento, y que probablemente no vuelva a ver nunca más.

Y así, ese día que se supone sería de celebración, todos los fans del comic fuimos defecados de una manera u otra. 

¿Larga vida al comic? C0judec3s...