Con su llegada a Japón, Netflix no solo adquirió un buen número de animes, sino que también se propuso a revivir viejas glorias de la televisión japonesa, como es el caso de Ainori, un reality show nacido el año 1999 y cuyo principal atractivo radica en mezclar contenido cultural y bonitos paisajes con enredos amorosos y ataques de celos. Sí, aunque usted no lo crea.
El concepto es sencillo y se ha mantenido igual en todas sus temporadas: un grupo de cuatro chicos y tres chicas se unen en un viaje por carretera a través de distintos países y en el camino van conociéndose y creando parejas entre ellos. Ah, y de paso también conviven con los lugareños y van aprendiendo de otras culturas. Vendría a ser algo así como... ¿"Televisión basura educativa"? Porque de que aprendes algo, aprendes algo (como que en Birmania hay un templo con los cabellos de Buda o que Vietnam posee la caverna más grande del mundo con estalagmitas de hasta 70 metros de alto), pero eso no quita que el centro de todo sean los hilarantes líos amorosos que se arman entre los participantes.
Por ejemplo, en esta nueva versión titulada "Asian Journey" (el viaje va desde Vietnam hasta Singapur), los protagonistas masculinos son en su mayoría unos freaks de cuidado: un youtuber treinteañero que nunca ha tocado a una mujer, un boxeador que prometió no tener novia hasta ganar un título importante y así se le fueron diez años, un oficinista que entra en crisis cuando le quitan el teléfono... Y hacer que ellos entren en contacto con las chicas es sumamente difícil, al punto de que son ellas mismas las que tienen que reclamarles a los muchachos por su falta de iniciativa. Y ESO SOLO ES EL PRIMER CAPÍTULO.
Así pues, si te gustan los realitys romanticones y de paso quieres aprender cosas nuevas sobre países exóticos, Ainori es tu programa.
El concepto es sencillo y se ha mantenido igual en todas sus temporadas: un grupo de cuatro chicos y tres chicas se unen en un viaje por carretera a través de distintos países y en el camino van conociéndose y creando parejas entre ellos. Ah, y de paso también conviven con los lugareños y van aprendiendo de otras culturas. Vendría a ser algo así como... ¿"Televisión basura educativa"? Porque de que aprendes algo, aprendes algo (como que en Birmania hay un templo con los cabellos de Buda o que Vietnam posee la caverna más grande del mundo con estalagmitas de hasta 70 metros de alto), pero eso no quita que el centro de todo sean los hilarantes líos amorosos que se arman entre los participantes.
Por ejemplo, en esta nueva versión titulada "Asian Journey" (el viaje va desde Vietnam hasta Singapur), los protagonistas masculinos son en su mayoría unos freaks de cuidado: un youtuber treinteañero que nunca ha tocado a una mujer, un boxeador que prometió no tener novia hasta ganar un título importante y así se le fueron diez años, un oficinista que entra en crisis cuando le quitan el teléfono... Y hacer que ellos entren en contacto con las chicas es sumamente difícil, al punto de que son ellas mismas las que tienen que reclamarles a los muchachos por su falta de iniciativa. Y ESO SOLO ES EL PRIMER CAPÍTULO.
Así pues, si te gustan los realitys romanticones y de paso quieres aprender cosas nuevas sobre países exóticos, Ainori es tu programa.
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